Nat Turner, William Blake, Johann Pestalozzi, Chico Mendes, Rafael del Riego, Champollion, Nelson Mandela, Julio César, Davy Crockett, Carlomagno, George Gordon Byron, Beatriz Galindo, Alfonso X el Sabio.
Cuando uno busca tan extremadamente los medios de hacerse temer, encuentra antes siempre el medio de hacerse odiar.
Montesquieu (1689 - 1755), escritor y pensador francés.
Nadie nace odiando a otra persona por el color de su piel, o su origen, o su religión. El odio se aprende, y si es posible aprender a odiar, es posible aprender a amar. El amor llega más naturalmente al corazón humano que su contrario.
Nelson Mandela (1918 - 2013), abogado, político y presidente sudáfricano.
Acumular amor significa suerte, acumular odio significa calamidad.
Paulo Coelho (1947 - ), novelista y dramaturgo brasileño.
El odio es una tendencia a aprovechar todas las ocasiones para perjudicar a los demás.
Plutarco (h. 50 ó 46 - h. 120), historiador, biógrafo y ensayista griego.
El odio es el amor sin los datos suficientes.
Richard Bach (1936 - ), escritor y aviador estadounidense
Hay que amar lo que es digno de ser amado y odiar lo que es odioso, más hace falta buen criterio para distinguir entre lo uno y lo otro.
Robert Frost (1874 - 1963), poeta estadounidense.
La ira es un hierbajo, el odio es el árbol.
San Agustín (354 - 430), obispo de Hipona y Padre de la Iglesia latina.
Incluso si tu enemigo sufriera como deseas, ¿en qué te beneficiaría a ti? Si me respondes: "al menos, me sentiría satisfecho", ¿existe mente más infame que esta?
Si tengo dolorosos sentimientos de odio, no disfrutaré de paz interior ni encontraré alegría ni felicidad, estaré inquieto y seré incapaz de dormir.
Shantideva (687 - 763), budista indio y maestro de meditación.
El odio no disminuye con el odio. El odio disminuye con el amor.
No existe incendio tan grande como la pasión; no existe ningún mal tan grande como el odio.
Siddharta Gautama (563 a. C. - 483 a. C.), príncipe hindú, fundador del budismo.
A menudo el odio se disfraza con una careta sonriente y la lengua se expresa en tono amistoso, mientras el corazón está lleno de hiel.
Solón (638 aC.- 558 aC.), legislador y poeta ateniense y uno de los Sietes Sabios de Grecia.