Thomas Hobbes, Lord Carnarvon, Juana la Loca, Josip Broz Tito, Isaac Newton, Gerardo Mercator, Alfonso V de Aragón, Amadeo de Saboya, Henry Dunant, Ramses II, Georges Washington, Aretha Franklin, Felipe II, Jesucristo.
No ha de maravillarnos que el azar pueda tanto sobre nosotros ya que existimos por azar.
Michel de Montaigne (1533 - 1592), filósofo, escritor, humanista y moralista francés.
Tal vez no podamos escapar del destino del ser humano, pero podemos elegir entre sufrir nuestro destino o disfrutar de él, entre sufrir o amar y ser feliz, entre vivir en el infierno o vivir en el cielo. Mi elección personal es vivir en el cielo. ¿Y la tuya?
Miguel Ángel Ruiz Macías (1952 - ), escritor y orador mexicano influenciado por Carlos Castaneda.
Humillar a alguien es hacerle sufrir un destino innecesariamente cruel.
Nelson Mandela (1918 - 2013), abogado, político y presidente sudáfricano.
La casualidad es uno de los nombres de la providencia.
Nicolás Sebastien Roch Chamfort (1741 - 1794), moralista francés.
Pienso que la fortuna es el árbitro de la mitad de nuestras acciones, pero que también nos deja gobernar la otra mitad, o casi, a nosotros.
Nicolás Maquiavelo (1469 - 1527), filósofo, escritor y estadista italiano.
Los soberanos huéspedes de ojos llenos de destino.
Novalis (1772 - 1801), poeta romántico alemán.
¿Sabes lo que te puede acontecer mañana? Ten confianza, pues, de lo contrario, no dejará el infortunio de justificar tus temores. No te apegues a nada. No interrogues los libros ni a los hombres: él destino es inescrutable.
Abandónate al destino y adáptate a las circunstancias, pues lo que está escrito no se borra porque tú quieras.
Todo es un tablero de ajedrez de noches y días, donde el destino, con hombres como piezas, juega: Acá y acullá mueve, y da jaque y mata, y uno por uno, vuelve a ponerlos en la caja.
Ghiyath al-Din Abu l-Fath Omar ibn Ibrahim Jayyam Nishapurí (1048 - 1131), matemático, astrónomo y poeta persa.
En los muros del tiempo trabajamos todos como arquitectos de nuestro propio destino. Que cada ocasión sea una gran ocasión, porque no sabéis cuándo el destino os favorecerá para situaros en más alto puesto.
Si no tienes metas propias estás condenado a cumplir las de los demás.
Orison Swett Marden (1850 - 1924), escritor de autoayuda y moralista estadounidense.
No existen presagios. El destino no nos manda mensajeros. Es demasiado sabio o demasiado cruel para hacerlo.
Oscar Wilde (1854 - 1900), escritor, poeta y dramaturgo irlandés.