Thomas Hobbes, Lord Carnarvon, Juana la Loca, Josip Broz Tito, Isaac Newton, Gerardo Mercator, Alfonso V de Aragón, Amadeo de Saboya, Henry Dunant, Ramses II, Georges Washington, Aretha Franklin, Felipe II, Jesucristo.
Una sola palabra es suficiente para destruir la dicha de los hombres.
François-René de Chateaubriand (1768 - 1848), político y escritor francés.
Cuando las personas tienen libertad para hacer lo que quieren, por lo general comienzan a imitarse mutuamente.
Nos acostumbramos a los defectos de los demás cuando no nos creemos obligados a corregirlos.
Françoise Sagan (1935 - 2004), escritora francesa.
No dejes que el mal te confunda y creas que puedes tener secretos para él.
Franz Kafka (1883 - 1924), escritor checo que escribió su obra en alemán.
Allí donde radican nuestras debilidades van a extraviarse nuestras exaltaciones.
La demencia en el individuo es algo raro; en los grupos, en los partidos, en los pueblos, en las épocas, es la regla.
Muchas veces es más fácil estar conformes que comprender.
Toda convicción es una cárcel.
Friedrich Wilhelm Nietzsche (1844 - 1900), filósofo alemán.
A algunos hombres los disfraces no los enmascaran, sino que los revelan.
La gente pelea únicamente porque no sabe discutir.
Gilbert Keith Chesterton (1874 - 1936), escritor británico.
El hombre tiene necesidad de engañarse a sí mismo.
Gao Xingjian (1940 - ), escritor chino nacionalizado francés, premio Nobel de Literatura en 2000.
El vicio es un derroche de vida. La pobreza, la obediencia y el celibato son los vicios.
George Bernard Shaw (1856 - 1950), escritor irlandés.