Nelson Mandela, Julio César, Davy Crockett, Carlomagno, George Gordon Byron, Beatriz Galindo, Alfonso X el Sabio, Enrique VIII, Teodosio, El Gran Capitán, Marco Aurelio, Catalina de Aragón, Gustavo Adolfo Becquer.
El hoy y el ayer son las piedras con que construimos.
Henry Wadsworth Longfellow (1807 - 1882), poeta estadounidense.
Estamos más cerca de nosotros mismos cuando alcanzamos la seriedad del niño al jugar.
No encontrarás los confines del alma ni aún recorriendo todos los caminos; tal es su profundidad.
Quien no puede buscar lo imprevisto, no ve nada por el camino conocido, es un callejón sin salida.
Heráclito de Éfeso (h. 540 a. C. - h. 480 a. C.), filósofo griego presocrático.
¡Qué extraño es vagar en la niebla! Ningún hombre conoce al otro.
Llama al pasado, llama al futuro: ¡Ambos se hallan en ti!
Hermann Hesse (1877 - 1962), escritor suizo de origen alemán, Premio Nobel en 1946.
Emprende el viaje a Ítaca, pero demórate lo más que puedas. Haz muchas escalas, teniendo siempre presente tu isla, la que estas buscando. Al final llegas a Ítaca y ¿que vás a descubrir? Que la verdadera Ítaca era el viaje.
Míseros mortales que, semejantes a las hojas, ya se hallan florecientes y vigorosos comiendo los frutos de la tierra, ya se quedan exánimes y mueren.
Homero (h. siglo VIII a. C.), poeta y rapsoda griego autor de "La Iliada" y "La Odisea".
Imagina que cada día es el último que brilla para ti, y aceptarás agradecido el día que no esperabas vivir ya.
Nunca la vida dio a los mortales algo que no fuera a precio de un gran cansancio.
Quinto Horacio Flaco (65 a. C. - 8 a. C.), poeta lírico y satírico romano.
¿Quién sabe el final? Lo que ha subido puede hundirse, y lo que se ha hundido puede aumentar. La detestabilidad espera y sueña en lo profundo, y la decadencia se extiende sobre las tambaleantes ciudades de los hombres.
Ningún nuevo horror puede ser más terrible que la tortura diaria de lo cotidiano.
Howard Phillips Lovecraft (1890 - 1937), escritor estadounidense.