Sigmund Freud, Rousseau, Konrad Adenauer, Charles Darwin, Nefertiti, Cervantes, Carlos I de España, Jorge III de Inglaterra, Thomas Malthus, Vasco da Gama, Constantino I, Malcolm X, Linus Pauling, David Livingstone.
La ignorancia es atrevida.
Domingo Faustino Sarmiento (1811 - 1888), escritor y político argentino.
Las cosas pequeñas entretienen a las mentes pequeñas.
Doris Lessing (1919 - 2013), escritora británica, Premio Nobel de Literatura en 2007.
Tengo una gran fe en los tontos; autoconfianza lo llaman mis amigos.
Edgar Allan Poe (1809 - 1849), escritor estadounidense.
Si la finalidad del tiempo libre es dedicarlo a ver unas horas extras diarias de televisión, nos deterioraremos como personas.
Eleanor Roosevelt (1884 - 1962), escritora, activista, política estadounidense y primera dama.
El consejo dado a un necio es como arrojar perlas a la basura.
Esopo (h. 620 a. C. - h. 564 a. C.), fabulista griego clásico.
El que habla a un necio, aunque sea prudente, parecerá también necio.
Eurípides (480 a. C. - 406 a. C.), poeta trágico griego.
Todas las cosas fluyen, dice el sabio Heráclito; pero la vulgaridad barata nos ha de sobrevivir.
Ezra Pound (1885 - 1972), poeta y ensayista estadounidense de la "Generación perdida".
Lo mejor para ser engañado es considerarse más listo que los demás.
No hay necios más insoportables que aquellos que tienen algún talento.
Francisco VI, duque de La Rochefoucauld (1613 - 1680), escritor, aristócrata y militar francés.
Bien se puede perdonar a un hombre necio una hora, cuando hay tontos que no lo dejan de ser una hora en toda su vida.
Francisco de Quevedo (1580 - 1645), escritor español.
Cada uno, tomado aparte, es pasablemente inteligente y razonable, reunidos, no forman ya entre todos, sino un solo imbécil.
Johann Christoph Friedrich von Schiller (1759 - 1805), poeta y dramaturgo alemán.
Hay cien ingeniosos por uno que posee juicio, una frase muy cierta y que tranquilizará a más de un necio sin ingenio, que, no obstante, debería pensar -si no es mucho pedirle a un necio- que también hay cien personas carentes de ingenio y de juicio, por una que posee ingenio.
Georg Christoph Lichtenberg (1742 - 1799), científico y escritor alemán.