Sigmund Freud, Rousseau, Konrad Adenauer, Charles Darwin, Nefertiti, Cervantes, Carlos I de España, Jorge III de Inglaterra, Thomas Malthus, Vasco da Gama, Constantino I, Malcolm X, Linus Pauling, David Livingstone.
Nunca es agradable vivir el fin de algo.
Yo me conformaría con que la muerte fuera simplemente un descanso, como dormir.
Juan Manuel Puig Delledonne (1932 - 1990), escritor argentino.
Decimos, es verdad, que la hora de la muerte es incierta; pero cuando decimos esto nos representamos esa hora como situada en un espacio vago y lejano, no pensamos que tenga una relación cualquiera con la jornada ya empezada y que pueda significar que la muerte —o su primera toma de posesión parcial de nosotros, después de la cual ya no nos dejará— pueda producirse esa misma tarde, tan poco incierta, esta tarde en la que el uso de todas las horas ya está perfectamente establecido.
Marcel Proust (1871 - 1922), escritor francés.
No muere el hombre si su muerte vive.
Saber morir es la primera fortuna para los hombres.
Marco Anneo Lucano (39 - 65), poeta romano nacido en Corduba, en la Bética española.
La pérdida no es otra cosa que un cambio, y el cambio es el deleite de la naturaleza.
No desprecies la muerte, pero acéptala de buen grado, pues forma parte de lo establecido.
Un hombre no debería tener miedo a la muerte, debería tener miedo a no empezar nunca a vivir.
Marco Aurelio Antonino Augusto (121-180), emperador romano y filósofo estoico.
Comamos, bebamos y gocemos, que tras la muerte no habrá ningún placer.
La vida de los muertos está en la memoria de los vivos.
No quiero morir, aunque en realidad el estar muerto me parece indiferente.
Marco Tulio Cicerón (106 a. C. - 43 a. C.), político, filósofo y escritor romano.
Más triste que la muerte es la manera de morir.
Marco Valerio Marcial (40 - 104), poeta hispanorromano.