Juan Pablo II, Pedro de Valdivia, Ghandi, Alfred Nobel, Lula da Silva, Martin Lutero, Simone de Beauvoir, Alfonso XIII, Pablo VI, Fernando VII, Fidel Castro, Frida Kahlo, Hernán Cortés, Yuri Gagarin, Sócrates.
Todo el que teme la muerte, es un ateo de corazón.
Marlene Dietrich (1901 - 1992), cantante y actriz alemana nacionalizada estadounidense.
La interpretación existencial de la muerte precede a toda biología y ontología de la vida.
La muerte es comprendida en tal decir como algo indeterminado que ha de llegar alguna vez y de alguna parte, pero que por ahora no está todavía ahí para uno mismo y que, por lo tanto, no amenaza.
No experimentamos, en sentido propio, el morir de los otros, sino que, a lo sumo, solamente "asistimos" a él.
Martin Heidegger (1889 - 1976), filósofo alemán.
Todo hombre debe hacer a solas dos cosas; debe creer por sí mismo y morir por sí mismo.
Martin Luther (1483 - 1546), teólogo alemán líder de la Reforma protestante.
Lo terrible no es la llegada de la muerte, sino el adiós a la vida.
Todo nuestro conocimiento sólo nos ayuda a morir de un modo más doloroso que los animales que nada saben.
Maurice Maeterlinck (1862 - 1949), dramaturgo y ensayista belga.
¿Y si la muerte no fuese más que otra vida en la que no supiéramos lo que fuese la muerte?
La tierra está hecha del polvo de los muertos.
Ningún hombre sabe en dónde ha de morir.
Max Aub Mohrenwitz (1903 - 1972), escritor español exiliado en México durante tres décadas.
La muerte es el comienzo de la inmortalidad.
Maximilien Robespierre (1758 - 1794), escritor francés y líder de la Revolución Francesa.
El hombre no está hecho para aceptar la muerte: ni la suya ni la de los demás.
Michel Houellebecq (1955 - ), poeta, novelista y ensayista francés.